sábado, 4 de septiembre de 2010

Epicteto: Manual o Enchyridion. La idea del mundo como teatro. La influencia en Quevedo y Calderón.

"Acuérdate que eres actor en una obra teatral, larga o corta, en que el autor ha querido hacerte entrar. Si él quiere que juegues el papel de un mendicante, es preciso que lo juegues tan bien como te sea posible. Igual, que si quiere que juegues el papel de un cojo, un príncipe, un hombre del pueblo. Pues eres tú quien debe representar el personaje que te ha sido dado, pero es otro a quien le corresponde elegírtelo"
El  filósofo griego Epicteto (Hierápolis, 55 – Nicópolis, 135) aunque era de origen esclavo, de joven estudió los escritos de los estoicos y después de conseguir su libertad fue a enseñar filosofía a Roma hasta el año 90 d.C. En esta fecha el emperador romano Tito Flavio Domiciano, temeroso de los peligros que a su parecer entrañaban las enseñanzas de los estoicos, envió a Epicteto y a otros filósofos al exilio. Epicteto se instaló en Nicópolis, al sur de Epiro, donde murió. Las enseñanzas de Epicteto se han conservado en dos obras compiladas por su alumno, el historiador y filósofo griego Flavio Arriano: Manual o Enchyridion de Epicteto, que se conserva completo, y las Disertaciones o Diatribas, de las que se guardan cuatro de los ocho libros que las componían. Sus enseñanzas, una vez liberadas de sus antiguos atavíos culturales, tienen una misteriosa y absoluta vigencia. En algunos momentos su filosofía se asemeja a lo mejor de la psicología contemporánea. Una cosa como la Plegaria de la Serenidad, la cual compendia el movimiento de la recuperación: "Concededme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las que sí puedo y la sabiduría para establecer esta diferencia"
 Para Epicteto una vida feliz y una vida virtuosa son lo mismo. La felicidad y la plenitud personal son las consecuencias naturales de hacer lo que es correcto. Al igual que Sócrates, Epicteto fue un conferenciante, no dejó escritos filosóficos. Pero por fortuna su discípulo Flavio Arriano preservó los principales aspectos de su filosofía para las generaciones futuras. Discípulo suyo fue el emperador Marco Aurelio, que en sus Meditaciones plasmó las enseñanzas recibidas.
La imagen de la vida humana como un teatro puede rastrearse desde la Antigüedad en los filósofos pitagóricos y en el Filebo de Platón. Se divulga sobre todo en la obra de los estoicos, en particular en las Epístolas morales a Lucilio de Séneca y el Enquiridion de Epícteto. En particular este último texto fue clave para la difusión de la imagen del theatrum mundi en el Renacimiento europeo. Ángel Valbuena Prat propuso como fuente directa del tema del teatro del mundo en Calderón un fragmento de una obra de Quevedo, el Epicteto y Phocílides en español con consonantes (Madrid, 1635).
" No olvides que es comedia nuestra vida
y teatro de farsa el mundo todo
que muda el aparato por instantes
y que todos en él somos farsantes;
acuérdate que Dios, de esta comedia
de argumento tan grande y tan difuso,
es autor que la hizo y la compuso.
al que dio papel breve,
solo le tocó hacerle como debe;
y al que se le dio largo,
solo el hacerle bien dejó a su cargo.
Si te mandó que hicieses
la persona de un pobre o un esclavo,
de un rey o de un tullido,
haz el papel que Dios te ha repartido;
pues solo está a tu cuenta
hacer con perfección el personaje,
en obras, en acciones, en lenguaje;
que al repartir los dichos y papeles,
la representación o mucha o poca
solo al autor de la comedia toca..".
En términos semejantes hace Calderón hablar a Segismundo, en el acto III, cuando éste dice:
¿Otra vez — ¡qué es esto, cielos!—
queréis que sueñe grandezas,
que ha de deshacer el tiempo?
¿Otra vez queréis que vea
entre sombras y bosquejos
la majestad y la pompa
desvanecida del viento?
¿Otra vez queréis que toque
el desengaño o el riesgo
a que el humano poder
nace humilde y vive atento?
Pues ¡no ha de ser, no ha de ser!
Miradme otra vez sujeto
a mi fortuna. Y pues sé
que toda esta vida es sueño,
idos, sombras, que fingís
hoy a mis sentidos muertos
cuerpo y voz, siendo verdad,
que ni tenéis voz ni cuerpo;
que no quiero majestades
fingidas, pompas no quiero,
fantásticas, ilusiones
que al soplo menos ligero
del aura han de deshacerse,
bien como el florido almendro,
que por madrugar sus flores,
sin aviso y sin consejo,
al primer soplo se apagan,
marchitando y desluciendo
de sus rosados capillos
belleza, luz y ornamento.
Ya os conozco, ya os conozco,
y sé que os pasa lo mesmo
con cualquiera que se duerme.
Para mí no hay fingimientos,
que, desengañado ya,
sé bien que la vida es sueño.
".."
Es compendio y extracto de otras reseñas.
http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:ydKXZWIoHckJ:cvc.cervantes.es/literatura/calderon_europa/schwartz.htm+epicteto+literatura+influencia+teatro+calderon&cd=2&hl=es&ct=clnk&gl=es
http://www.upasika.com/docs/helenistica/Epicteto%20-%20Manual.pdf
http://es.wikipedia.org/wiki/El_gran_teatro_del_mundo
http://worcel.com/archivos/6/epicteto.htm
http://www.personal.able.es/cm.perez/epicteto.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Epicteto
http://www.epdlp.com/escritor.php?id=4546

2 comentarios:

  1. hi everybody


    just registered and put on my todo list


    hopefully this is just what im looking for, looks like i have a lot to read Im trying to find a way to build an e-mail list.

    ResponderEliminar
  2. Hola, José María. Me ha gustado el artículo y quería decirtelo. "La vida es sueño", de Calderón, me dice mucho.

    Un saludo.

    ResponderEliminar